La metodología interseccional es una lente estructurada para observar la experiencia de grupos diversos. Por diverso no nos referimos sólo a las diferencias biológicas (sexos) y socioculturales (géneros), sino también a las múltiples características que se entrecruzan y contribuyen a la formación de nuestra identidad, como la raza, la etnia, la religión, la edad y la discapacidad física o mental, la edad, la cultura. Todos los argumentos y materiales para la educación y el desarrollo se construyen a partir de la pluralidad de agentes que conforman la sociedad, es decir, se consideran todos los pilares de la diversidad. Desde las dinámicas hasta las estéticas, medios y referentes ejemplificadores se desarrolla para una experiencia plural. Sin la lente de la Interseccionalidad corremos el riesgo de pasar por alto o malinterpretar las experiencias de una parte importante de las personas dentro y fuera de la organización, y como consecuencia corremos el riesgo de desarrollar acciones e iniciativas que pueden aumentar las desigualdades de forma inadvertida.